Durante estos meses invernales los agricultores dedican parte de su tiempo a arar, subsolar, estercolar...; también es el momento adecuado para solventar el problema del exceso de agua sobre la superficie o el perfil del suelo con el fin de establecer las condiciones óptimas para el desarrollo de los cultivos de regadío: mantener una buena aireación y actividad biológica indispensable para el crecimiento radicular, evitar el desarrollo de enfermedades fungosas, favorecer las condiciones térmicas del terreno y facilitar el acceso y movilidad de la maquinaria para efectuar las tareas agrícolas. Para realizar el drenaje una retro excava una zanja, desde la zona conflictiva hasta un colector, posteriormente se introduce una tubería ranurada del diámetro adecuado al agua que se desea evacuar; esa tubería va rodeada de canto rodado lavado para facilitar la circulación por la zanja.