CHD: Valdelaviña merece más respeto.
Una nueva normativa de la Confederación Hidrográfica del Duero pretende limitar la plantación de choperas en las vegas al ampliar el dominio público hidráulico, entre otros motivos, para evitar los riesgos en infraestructuras: puentes, caminos y carreteras. Este cambio de criterio supondrá una menor superficie de plantación y, en consecuencia, Ayuntamientos y Pedanías verán disminuidos notablemente sus ingresos por la menor venta de madera. En ningún momento Confederación ha consultado a los titulares implicados.
Conocedoras las autoridades municipales de Villafer, según consta en los Libros de Actas desde 1900 hasta 1975, de que la Ley encargaba a los Ayuntamientos la exclusiva administración y conservación de los bienes de aprovechamiento común pusieron especial empeño en mantener la integridad de las fincas aluviales comunales acometiendo con urgencia las obras necesarias para encauzar el Esla, evitar los destrozos de las fincas, salvar las plantaciones y praderas ribereñas locales para optimizar al máximo esos recursos disponibles en beneficio del vecindario. Cuando en sesión extraordinaria del 4 de mayo de 1974 la Corporación Municipal de Villafer acordó la incorporación del Municipio de Villafer al de Villaquejida determinó que "...los bienes de propios y comunales hoy pertenecientes al Ayuntamiento de Villafer pasarán a integrarse con el mismo carácter en el Patrimonio y consiguiente Inventario de Bienes de la Entidad Local Menor de Villafer". En los últimos 45 años la Junta Vecinal ha seguido administrando ese patrimonio con criterios similares a los empleados por la Corporación Municipal. Se ha utilizado en este artículo como fuente de información los Libros de Actas de Sesiones de la Corporación Municipal y de la Junta Vecinal de Villafer.
La emblemática Valdelaviña, la joya de la corona. Todas las fincas aluviales comunales (suman la superficie de unas 80 hectáreas) fueron cuidadas y mimadas para obtener el máximo beneficio pero, sobre todas, destaca una que refleja la máxima atención permanente a pesar de su pequeña extensión de solo 8 has.: se trata de Valdelaviña que linda al este con Los Herreñales, al sur con la manga del Esla, al norte y al oeste con La Isla. Esta finca que nos ocupa y preocupa dispuso desde principios del siglo XX hasta 1963 de un plantío y de una pradera; desde 1963 hasta 1983 pasó a ser solo pradera y desde 1983 hasta 2019 se convirtió en plantío industrial de chopos. En su zona oriental, junto a Las Cuestas, los treinta últimos años del siglo XX aprovechando el nivel freático se construyeron pozos para regar fincas particulares "Cuestas Arriba" a raíz de la Concentración Parcelaria de principios de los setenta del pasado siglo.
Pero actualmente, por desgracia, permanece inculta sin posibilidades de ofrecer a la localidad recursos económicos para elaborar presupuestos ordinarios y extraordinarios.
Citamos algunas tareas, prestaciones y proyectos que protagonizó esta significativa parcela local hoy inactiva. Todos ellos se vivieron con pasión y esmero por las autoridades y habitantes de Villafer.
I. Defensa de la integridad de la parcela. A modo de ejemplos señalamos que en sesión del 19 de noviembre 1905 la Corporación decidió realizar una limpia y entresaca en Valdelaviña; con la leña obtenida construyeron una estacada en la finca "... que encauce el río Esla a fin de evitar los perjuicios de rotura"; durante la sesión del 18 de noviembre de 1932 se dio cuenta de dos denuncias presentadas por el Guarda Jurado acerca de que " varios vecinos de ésta se han dedicado a la roturación arbitraria en la pradera de este municipio llamada Valdelaviña. Vista la reincidencia de los individuos... se acuerda por unanimidad que mañana vaya el Sr. Alcalde a la capital de la provincia para que dé cuenta de todo lo expuesto al Sr. Gobernador Civil y le consulte la manera de proceder...". CHD, según consta en los Libros de Actas de la Pedanía de Villafer del 3 de noviembre del 2001, comunicó a la Junta Vecinal la decisión de construir una escollera en la finca aluvial local de La Barca o Paleriza pero esa escollera perjudicó al plantío de Valdelaviña. Para resolver el problema creado la Junta Vecinal en sesión del 11 enero 2002 acordó "... solicitar a Confederación que hagan una escollera en ese lugar". Enviaron solicitud al Ayuntamiento para que fuera ratificado en pleno. Confederación llevó a cabo con prontitud la petición transportando en camiones piedra del Páramo calizo de La Mudarra para construir con ella una escollera, eficaz defensa de Valdelaviña.
En cuatro sesiones extraordinarias celebradas en 1974 la Corporación Municipal trató el tema de los desperfectos que los camiones de la empresa Bernal Pareja S. A. estaban ocasionando en la pradera de Valdelaviña. En la sesión del 8 de febrero acordó "...formular denuncia contra los dueños de los camiones que han invadido la finca de Valdelaviña para su paso a la cascajera" ; en la del 22 del mismo mes fijaron el canon por el paso de camiones: "...el paso se hará por la rodera actual sin invadir la finca por otras partes..." ; en la del 20 de marzo se dio cuenta de la "... aceptación de las condiciones impuestas a la Empresa Bernal Pareja S.A. para el paso de camiones y maquinaria por la finca Valdelaviña,..." y acordaron que "...el período por el que se autoriza es de cinco meses, el canon que dicha Empresa ha de abonar es de dos mil pts. mes". En la sesión del 8 de noviembre se dio cuenta "... del juicio de faltas celebrado en La Bañeza, por daños en Valdelaviña".
II. Frecuente escenario de la Celebración de la Fiesta del Árbol. Con objetivos repobladores y educativos y de carácter nacional obligatorio el 5 de enero de 1915 se instauró en España la Fiesta del Árbol mediante una Real Orden que obligaba a cada Ayuntamiento a celebrarla anualmente. Del corto período en que estuvo vigente la orden frecuentemente la Corporación eligió como escenario a Valdelaviña, junto al Tejar. Así el 9 de abril de 1917 acordaron iniciar la fiesta " ...a las tres de la tarde... y que se dé a los niños naranjas y mantecadas" ; los gastos originados por la celebración ascendieron a 52 pts., incluyendo los jornales para la plantación. El 7 de abril de 1918 se agasajó a los escolares con naranjas y mantecadas; los gastos ascendieron a 75 ptas. también incluían el jornal de los obreros por excavar las hoyas de plantación. La fiesta de 1919 se celebró el 5 de mayo y el obsequio para los escolares consistió en dulces y naranjas. El 6 de marzo de 1921 acordaron que el Alcalde se encargase de "... buscar obreros para la plantación de los árboles y que se dé cuenta de este acuerdo a los Srs. Maestros". El 2 de abril de 1923 obsequiaron a los niños con 21 libras de mantecadas y se añadía que "... como no hay naranjas en ésta se den a los niños y niñas además de mantecadas, cinco céntimos a cada uno". La celebración de 1924 tuvo lugar el 23 de marzo; " ...se avisará a los Sres. Maestros para que en unión de todos los niños y niñas que asistan a la función y también se invite al Sr. Cura, Sr. Médico y Sr. Juez, y que se compren naranjas y dulces para regalárselas a los niños"; los gastos ascendieron a 55 ptas. Valdelaviña se convirtió en el principal escenario pedagógico fuera del aula.
III. Proyectos. Citamos algunos de los proyectos que sobre esta parcela se vivieron con pasión por el pueblo o por grupos de personas. En 1901: Iniciativa municipal de aquiñonar la finca y repartirla entre los vecinos. Arriendo en explotación colectiva: en la Sesión del 7 de junio de 1936 se presentó una instancia suscrita por el Presidente en funciones de la Sociedad filial afecta a la Sociedad de Trabajadores de la Tierra de Villafer. Una vez leída, acordaron "... ceder en arriendo la pradera propiedad de este municipio denominada la Valdelaviña a la Sociedad filial, afecta a la Sociedad de Trabajadores de la Tierra para que la cultiven en colectividad de acuerdo con lo preceptuado en el Decreto de 19 de mayo y Reglamento de 8 de julio de 1931, elevado a Ley de la República en 9 de septiembre de 1931...". Entre las condiciones destacamos que el arriendo era por un tiempo mínimo de diez años, la Sociedad abonaría al Ayuntamiento en concepto de canon de arrendamiento la cantidad de veinte pts. por hectárea y año, la Sociedad pondría los cultivos y regadío ejecutando el Ayuntamiento los pozos o canales conducentes para dotar a la finca de agua suficiente para su riego. Este proyecto no se pudo ejecutar debido al inicio de la Guerra Civil Española.
Presentación de una instancia de la Hermandad de Labradores y Ganaderos en 1952 solicitando la roturación; división en lotes para producción agrícola con intención de arrendarla, iniciativa del Alcalde en funciones 1959. Explotación obrera en común, 1959, iniciativa presentada por Vicente Prieto Colinas y 32 firmantes más; transformación en finca agrícola, iniciativa de la Corporación Municipal: 1959; cesión a la Hermandad Local Sindical de Labradores y Ganaderos, final de diciembre de 1960; arriendo de sus pastos en 1963 a los ganaderos de ovejas 1963. Explotación industrial de chopos a partir de 1984.
IV. Aprovechamiento como plantío autóctono de chopos (populus nigra). Valdelaviña contaba con un plantío que constituía un recuso importante para ayudar a la población como demuestran algunas actuaciones. En diciembre de 1905 la Corporación Municipal concedió a D. Pablo Pastor, administrador del dueño de la Barca de Paso, dos vigas para arreglar el pontón del plantío de la Barca o Paleriza; en agosto de 1907 ante la instancia presentada por el herrero Gregorio Morla y varios vecinos la Corporación concedió dos pies de chopo "... con objeto de hacer un potro para herrar el ganado vacuno de los vecinos del pueblo"; en enero 1910 la Corporación concedió dos vigas de chopo a dos vecinos pobres para "... reedificar parte de sus viviendas venidas a ruina a efecto del último temporal de lluvia..." ; en mayo de 1910 concedieron también dos vigas: una para el arreglo de la casa de un pobre de solemnidad que amenazaba ruina y la otra a un pobre para arreglar su casa que también amenaba ruina.
En noviembre de 1905 la Corporación decide "... teniendo en cuenta la situación tan aflictiva en que se encuentra la clase jornalera por la carencia o escasez de trabajo..." acordó cortar y repartir del plantío de Valdelaviña una viga de chopo por cada vecino mediante sorteo. En la misma fecha la Corporación con el fin de favorecer a la clase jornalera, decidió darles empleo en una limpia y entresaca en Valdelaviña; en febrero del año siguiente la Corporación acordó, para atender a los gastos originados, cortar y vender los chopos necesarios para atender a los gastos y a finales de ese mismo mes decidió "... plantar chopos en Valdelaviña ... en la parte que ya fue plantío". En abril de 1912 acordaron vender en pública subasta las plantas arrancadas por la corriente en el plantío de Valdelaviña. A finales de enero de 1916 la Corporación acordó solicitar al Gobernador Civil "... permiso para la corta de vigas en el plantío de Valdelaviña destinadas a la construcción de la nueva casa Ayuntamiento" y el 10 de mayo de 1925 acordaron solicitar al gobernador Civil una "...corta de las vigas para con su importe proceder a la construcción o adquisición de casas para los Srs. Maestros".
V. Aprovechamiento como pradera. Durante muchos años del siglo pasado otra porción de Valdelaviña estaba destinada al pasto de la cabaña ganadera local: vacuno de labor, caballar de labor, mular de labor, asnal, lanar estante, lanar trashumante, cabría estante, cabría trashumante y pavadas.
El aprovechamiento de los pastos de las praderas comunales fue un derecho histórico fundamental del vecindario. Para el cuidado de la ganadería mayor local contrataban vaqueros o "jateros" que conducían las reses a los pastos y cuidaban de ellas todo el día; en la década de los 80 del siglo pasado el ganado mayor local había ido desapareciendo y los contratos se acordaban entre la Junta Vecinal y los dueños del ganado ovino. El pastoreo del ovino y caprino era misión de personas que podían ser dueños del rebaño o asalariados, en cambio un miembro de la familia de los dueños de pavos acompañaba a su pavadas en el campeo. Algunos propietarios de lanar durante meses practicaron anualmente la trashumancia en Belvís y en Alcobilla (Sanabria) aprovechando las dos "cañadas" que pasaban por la localidad: la del Prado del Valle que terminaba en el Camino de los Gallegos y la de Valdelaviña que unía a la localidad con la Dehesa de Belvís. La Corporación tasaba los pastos comunales de todas las fincas y confeccionaban anualmente el repartimientos de arbitrios.
Una decisión transcendental tuvo lugar para la finca en 1963: el arrendamiento de toda Valdelaviña por los ganaderos de lanar. Efectivamente el 16 de enero de 1963 la Corporación acordó comprar el Prado del Reguero del Valle "... considerando ventajosa la oferta hecha por su propietario D. Antonio Prado en carta dirigida al Sr. Alcalde de este Ayuntamiento"; en sesión del 28 de febrero del mismo año para amortizar el coste de su valor "... se conviene con los ganaderos de lanar arrendar el Prado del patrimonio titulado Valdelaviña en 20.000 ptas. anuales". En sesión del 8 de noviembre de 1984 la Junta Vecinal acordó "... inscribir en el Registro de la Propiedad ... la finca denominada Reguero del Valle o Prado Nuevo la cual fue adquirida en el año 1963 en 400.000 ptas. pagadas en 20 anualidades de 20.000 ptas. cada una..." y sigue "... al finalizar el pago de la compra-venta, esta Junta Vecinal ha tomado la decisión de registrar dicha propiedad". Con la última concentración parcelaria de la zona regable del término de Villafer a principios del siglo XXI esa finca comprada de 54 Has. se transformó en varias parcelas de regadío automatizado ubicadas en 6 polígonos distintos y fragmentadas en 13 parcelas la más extensa con 12,766 hectáreas que son arrendadas en pública subasta cada 6 años a vecinos empadronados en Villafer con un contrato de arrendamiento contemplado por la Ley de Contratos y Arrendamientos. Concluido el contrato de arriendo los desencuentros entre la Junta Vecinal y los dueños de ovino fueron a más y la posibilidad de un nuevo arriendo se esfumó por eso 27 de enero de 1984 la Junta Vecinal decidió que la explotación de Valdelaviña fuese la producción maderera en consorcio con la CHD.
VI. Aprovechamiento del nivel freático: construcción de Pozos para transformación en regadío de fincas privadas. En mayo de 1970 se fijó una reunión de la Corporación Municipal con el Ingeniero del Servicio Nacional de Concentración Parcelaria y Ordenación Rural, encargado de la redacción del Plan de Mejoras territoriales y obras de la zona de Villafer, cuya concentración parcelaria fue acordada por Decreto de 27 de noviembre de de 1969; en la sesión del 27 de mayo de 1973 se informó a la Corporación de un escrito del Instituto Nacional de Reforma y Desarrollo Agrario por el que se comunicó que "...se hacía entrega al Ayuntamiento de la red de caminos de este término, una vez terminadas las obras". Al aumentar la superficie de las parcelas concentradas varios vecinos proyectaron convertir sus nuevas fincas de secano en parcelas de regadío bombeando agua, en principio, desde Valdelaviña.
En la zona este de la finca y en paralelo a Las Cuestas aprovechando el nivel freático se construyeron unos 10 pozos para regar fincas particulares "Cuestas Arriba". Además de superar un desnivel vertical de más de 12 metros la tubería subterránea aportaba caudal a parcelas ubicadas a más de 1 km de distancia; CHD concedía los permisos de captación mediante el pago de un canon. Los interesados debían presentar un instancia al Ayuntamiento solicitando la cesión en arriendo de un trozo de terreno comunal suficiente para el acceso y apertura del pozo. Las condiciones impuestas por la Corporación solían ser: duración del contrato 5 años, pago de un canon 5000 pts. anuales y al finalizar el arrendamiento el pozo y las obras ejecutadas pertenecerían al Ayuntamiento. La Junta Vecinal siguió con los mismos sistemas de arrendamiento pero con distinta tarifa: en diciembre de 1983 se subió 8.000 pts. anuales. La explotación de este recurso finalizó a principios del siglo actual con la puesta en marcha del sistema de riego automatizado utilizando Canal de la Margen Izquierda del Porma.
VII. Explotación industrial de chopos. Se originaron desencuentros en el arriendo de Valdelaviña entre Junta Vecinal y los dueños de ovino en 1983 y principios de enero de 1984. La finca comunal seguía siendo fundamental para la localidad. En sesión celebrada el 27 de enero de 1984 la Junta Vecinal decidió que la explotación de Valdelaviña fuese la producción maderera en consorcio con la CHD. En este último aprovechamiento industrial se han realizado dos turnos de corta; entre febrero y marzo del 2019 el arbolado fue talado y comprado por Garnica por 163.880 euros. Desde entonces se ha realizado la tarea de destoconado en la primera quincena de febrero de este año pero sigue sin plantarse a la espera de las decisiones que tome la Confederación Hidrográfica del Duero.
Ninguna parcela de la Ribera del Esla debe ser abandonada, ninguna de Villafer y desde luego Valdelaviña merece volver a ser protagonista por la aportación de sus recursos a la economía local. Ojalá el próximo otoño una nueva plantación a raíz profunda capte su nivel freático y podamos contemplar la tercera generación de chopos industriales.