El Plan Nacional de Regadíos planificó a finales del siglo pasado la puesta en funcionamiento del regadío automatizado en la margen izquierda del Esla en su tramo leonés. El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y la Dirección General de Desarrollo Rural proyectaron ese plan que fue cofinanciado por la Unión Europea y construido por TRAGSA. El Canal de la Margen Izquierda del Porma entró en funcionamiento en 1992; con una longitud de 75.5 Km, a cielo abierto, con revestimiento de hormigón y sección trapecial, en los primeros años del  siglo XXI abastece de agua a los distintos sectores de riego de la zona señalada; sus usuarios están integrados en la Comunidad de Regantes del Canal de la Margen Izquierda del Porma.

pic-zona-norteEl sector XI, el más meridional, con una presupuesto de 16.783.376,51 euros, abarca los campos de Campazas, Catrillino y Villafer. La balsa y su estación de bombeo, ubicadas en las proximidades de la primera localidad, proporcionan agua a todas las parcelas del sector desde el año 2008. Castrillino ha optado por el monocultivo de sus 320 hectáreas (plantación de chopos orientada a la biomasa) y su correspondiente riego por goteo; por el contrario, Campazas y Villafer han preferido el policultivo y el riego por aspersión, salvo minúsculas excepciones.

Nos vamos a ceñir a continuación exclusivamente a la campaña de riego y cultivos del 2012 de Villafer que se beneficia de la transformación de terrenos de secano a regadío en la mayor parte de su terrazgo. Este hecho ha exigido la incorporación masiva de variados avances tecnológicos propios de un moderno regadío extensivo enpic-zona-centro 1.200 hectáreas. La gran actividad transformadora ha supuesto, además del entusiasmo de sentirse un agricultor profesional y trabajar como tal, un ingente movimientoeconómico a lo largo de estos últimos años: instalación de 34 pivots con un total de 132 torres (unidadesmotrices del pivot), cobertura subterránea o superficial, compra de gran número de hectáreas, arrendamientos, nueva maquinaria, drenajes de fincas, abonados apropiados, coste de obra (todavía se disfruta del período de carencia), facturas de riego por campaña, ventas de los productos en un mercado cada vez más globalizado y liberalizado…

pic-zona-surNuestros mayores dividían el campo en dos hojas que delimitaban el camino de las Bodegas y su continuación hasta la Dehesa de Valderas. Desde la concentración parcelaria de 1973 ese sistema de mantener una hoja sembrada y otra en barbecho (sistema de año y vez) se relajó.Con la reciente concentración (sólo para el terreno regable) el tradicional método ha desaparecido (mapa 1, 2 y 3). Por razones de orden práctico vamos a dividir la parte donde se ha instalado el riego en tres zonas; sus límites los fijan las carreteras que cruzan nuestro campo. Así llamamos zona norte (mapa 1) a las fincas ubicadas desde la carretera de Valencia hasta las rayas de Castrillino, Villaornate y Campazas; la zona centro (mapa 2) es la comprendida entre la carretera de Valencia y la de Valderas; la zona sur (mapa 3) se extiende desde la carretera de Valderas hasta parte de las propiedades de la casa Vieja de Belvís. Los caminos rurales están diseñados para sacar los productos al mercado. Con esta triple división y su correspondiente leyenda localizamos los productos sembrados y su extensión. Aunque Villafer practica el policultivo salta a la vista la clara primacía en la presente campaña del maíz.

 

pic1-climogramaEl aporte de agua por semana suele estar entre 50 y 60 litros por hectárea en cultivos como maíz, remolacha y alfalfa; el girasol y los cereales exigen menos riegos. Si observamos el climograma de Villafer  (gráfica 1) comprenderemos la necesidad de un gran caudal suplementario de agua para las cultivos; febrero, marzo, mayo, junio, julio, agosto y septiembre fueron meses áridos  (insuficiencia de agua en el suelo y en la atmósfera: el doble de la temperatura media de esos meses es mayor o igual que el total de las precipitaciones). Esta insuficiencia de lluvias supone un coste de riego por hectárea de 300 euros.

El aprovechamiento de los terrenos regables en la campaña 2012 es el que indican las gráficas 2 y 3. El maíz se ha convertido en nuestro campo en la gran alternativa a otros cultivos. Es destacable que 508 hectáreas (supone el 43% del terreno regable) se han dedicado a la producción de maíz. El agricultor ha empleado simiente de ciclos corto y medio y casas de semillas con buenos rendimientos; se sigue sembrando (salvo una explotación) en un marco de 21.5 cm. entre planta y a 53 cm. entre filas, como en la mayoría de la comarca. La producción de maíz genera un gran volumen de negocio en las empresas servidoras de semillas, fertilizantes, fitosanitarios, almacenes de secado, camiones de transporte, cosechadoras… pic2-sectorial-cultivosEs una materia prima fundamental en las empresas agroalimentarias dedicadas a la alimentación animal. Sabemos que León es la provincia de España que mayor superficie dedica a esta planta y la principal productora nacional.

El siguiente cultivo en extensión (150 hectáreas) es el forraje que representa el 12% del total de la superficie regable. Fundamentalmente se trata de fincas de alfalfa y residualmente ciertas praderas y veza. La alfalfa es una planta perenne que puede durar unos cinco años en pleno rendimiento; requiere pequeñas cantidades de micronutrientes (fundamentalmente boro); se suelen cortar cinco “pelos”. En nuestro pueblo se consume principalmente por las cabañas ovina y bovina locales; no obstante, una parcela de 40 hectáreas se ha orientado a la deshidratación; vivimos en una provincia que exporta alfalfa deshidratada a los países árabes por la demanda de este producto para la nutrición de especies lecheras y animales de alto rendimiento.

A los cereales están destinadas 133 hectáreas, 11% del total regable. Se trata de trigo, cebada y avena; suelen servir para el autoconsumo de los ganaderos y los excedentes se venden a almacenes; la totalidad del trigo está reservada también a almacenes foráneos.

pic3-sectorial-noregadosLa remolacha azucarera ocupa 132 hectáreas y representa un 11% de los nuevos regadíos. Se percibe una disminución en la siembra de esta campaña. Es un cultivo que exige una elevada cantidad de nutrientes por tener un ciclo vegetativo lento. Se suele obtener un buen rendimiento tanto en peso como en riqueza. La mayoría del producto se entrega a Ebro (azucareras de La Bañeza y Toro); una pequeña cantidad es molturada por la cooperativa ACOR. En su extracción intervienen grandes cosechadoras y es transportada a su destino por flotas de camiones.

El girasol, planta oleaginosa, ha supuesto el 5% de lo regado, 59 hectáreas. Sabemos que es un cultivo con gran capacidad para aprovechar residuos químicos aportados por los cultivos  anteriores. En nuestro campo se suele sembrar en el mes de mayo; la temperatura es un factor importante en su desarrollo pues si es muy alta durante la floración y llenado de grano, se produce una apreciable pérdida de producción final tanto en peso como en contenido de grasa. Necesita potasio principalmente antes de la floración y fósforo durante la misma.

pic4-tamano-explotacionesEn el capítulo de otros, 36 hectáreas y un 3% de lo regable, incluimos las patatas,  alubias  y chopos; las dos primeras permanecen de forma residual y han ido perdiendo interés por los agricultores debido principalmente a su comercialización; los chopos tienen su orientación a la biomasa. La tarifa para estas fincas en riego en la presente campaña es de 170 euros hectárea con el siguiente desglose: tasa de la Confederación Hidrográfica del Duero, 40 euros; tasa de gestión, 76 euros; gastos generales, 42 euros y tasa de la Comunidad de regantes, 12 euros.

Lo no regado que supone 176 hectáreas (un 15% de la superficie  regable) ha disminuido paulatinamente y de hecho para la próxima campaña se reducirá más. Queremos significar el gran aprovechamiento que los agricultores de la localidad están haciendo a la oferta de riego. Suelen ser parcelas sembradas de cereal (trigo, cebada o avena), fincas en barbecho o en baldío. La tarifa para estas fincas no regadas asciende la presente campaña a 42 euros en concepto de gastos generales.

En la gráfica de los no regados (gráfica 3) el cereal sembrado supone un 43%. Se cultiva trigo, cebada y avena. El barbecho ocupa el 38% de lo no regado; un 12% se siembra de girasol y solamente un 7% son parcelas en baldío.

El espacio agrario regable, territorio donde se desarrollan fundamentalmente las actividades agrícolas, ha ido transformando su fisonomía. Las explotaciones disminuyen en número y crecen en extensión. Sabemos que la explotación agrupa a todas las parcelas cultivadas por un mismo productor agrario aunque estén físicamente separadas entre sí e independientemente del régimen de tenencia: el agricultor puede ser propietario o tener arrendadas las parcelas. La gráfica 4 muestra la variedad del tamaño de las explotaciones. Diferenciamos tres tipos: pequeña, menos de 10 hectáreas, en esta campaña hay siete; mediana abarca una horquilla mayor: entre 10 y 30 hectáreas existen diez; de 31 a 50, nueve; de 51 a 70, cinco y de 71 a 90, tres; por fin hay una gran explotación de cerca de 130 hectáreas. Varios titulares de las explotaciones (personas o sociedades) cultivan también parcelas de secano en nuestro terrazgo o fincas en otras localidades de secano o regadío.

pic5-edadesLa población agraria ocupada (gráfica 5) ha ido decreciendo. Hay agricultores profesionales y otros que practican una agricultura a tiempo parcial (explotación que genera rentas complementarias a personas que tienen su actividad laboral principal en otros sectores productivos). En la gráfica observamos que el mayor número de personas que trabajan en el campo de Villafer se encuentran en el tramo de 50 a 59 años de edad. Es, sin embargo , esperanzador el dato de los jóvenes entre20 a 40. Todos han sabido aprovechar la posibilidad de sacar el máximo partido a sus fincas con el moderno regadío automatizado.