(lythrum salicaria)
Crece en lugares con humedad muy elevada, en ambas márgenes del Esla; una sola planta puede producir gran número de semillas pero también se propaga por fragmentos de raíz; es una hierba semiacuática, oriunda de las tierras húmedas de Eurasia; puede alcanzar hasta dos metros de altura formando colonias clonales con numerosas varas erectas que parten de una masa radicular única; los tallos son rojo purpúreos, de sección cuadrada; hojas lanceoladas; flores del mismo color que los tallos; fruto pequeño en cápsula con numerosas y diminutas semillas; la floración termina con el verano. En algunas zonas se ha hecho un control biológico de la salicaria por medio de insectos que se alimentan de ella.
Contiene los siguientes componentes activos: provitamina A, hierro, oxalato de calcio, glucosa, sacarosa…; la medicina herbolaria utiliza sus propiedades: se aprovechan las flores, los bulbos y las hojas tiernas. Mejora la circulación sanguínea por la cantidad de taninos que contiene; se usó en tratamientos de diarreas infantiles con peligro de deshidratación, también se recurrió a ella en el síndrome de intestino irritable, colitis, úlceras gastroduodenales y anemias; se emplea en uso tópico para heridas, úlceras varicosas, faringitis y eccemas; es sedante; se puede preparar en infusión o aplicarla a la piel en forma de emplastos. Con el pigmento de sus flores se tiñen los dulces de rojo; se han consumido sus brotes tiernos en ensaladas y en la preparación del té o infusiones.
