(falco peregrinus), campeón del Alto vuelo o Altanería.
La extensión del territorio del peregrino es muy variable, en nuestra zona suele aproximarse a los cuatro kilómetros cuadrados. Vive en espacios abiertos: las llanuras cerealísticas.
Su cabeza es redonda, pico cónico con base gruesa, ojos con iris castaño oscuro, pupila negra, ancha bigotera; el cuello corto, tronco poderoso, alas alargadas y puntiagudas; las partes superiores son oscuras o pardas, las inferiores blanco- rojizo con franjas de color negro; patas amarillas. Las paradas nupciales comienzan en febrero; no construyen nido, suelen usar una pletina de los brazos de los postes de alta tensión o una plataforma de la antena de la Torreta. A principios de marzo comienza la puesta de 3 a 4 huevos oscuros; la clueca no abandona el nido; cuando las crías vuelan pasan cerca de un mes en el cazadero de sus progenitores y posteriormente se emancipan.
Es cazador de campo abierto, un proyectil viviente, el especialista en vuelo picado, el ser más veloz de la naturaleza (supera los 300 km. hora); es ornitófago: depreda ortegas, alcaravanes, sisones, ánades reales, palomas, perdices…
Su calco en pequeño en nuestra zona es el alcotán (falco subbuteo).
